La feria del libro y Tomás Hirsch

Si bien el motivo principal de esta nota es dar una objetiva impresión de lo que vivimos el día sábado 27 de octubre, en la feria del libro de la Estación Mapocho, los corresponsales Patricia Escribano y Rafael Henríquez, gentilmente Patricia me ha cedido la responsabilidad de ser yo quien redacte esta nota.

Primero que todo llegamos a la casa de Mónica Mena, una mujer muy simpática y con harta ganas de darnos a conocer los fundamentos del Humanismo actual. Después de conversar de los proyectos, ver un corto sobre el movimiento humanista y mostarle un poco de lo que se trata El Rancahuaso y los blogs, fuimos a la Feria del Libro de la Estación Mapocho.
Ahí una vez que ingresamos entregando la invitación que Mónica nos entregó (porque de lo contrario tendríamos que haber cancelado el valor de la entrada, cosa que no termino por entender), recorrimos los estands, llenos de muchos libros, editoriales conocidas y desconocidas, hasta que en el B 24 nos encontramos con Tomás Hirsch, quien está firmando los libros que adquiríamos por la suma de nueve mil pesos.
Tomás se daba tiempo para compartir con todos los que quisieran fotos o una dedicatoria especial.
Con el libro bajo el brazo y un poco de tiempo antes de iniciar el evento, fuimos a una cafetería que se encontraba en el segundo piso.
A las 19:45 se iniciaba el lanzamiento del libro "El fin de la prehistoria" al que estábamos invitados, así que rápidamente bajamos al Salón de las Artes, de donde venía saliendo el escritor Gonzalo Rojas. Al ingresar al salón vimos que el lugar estaba lleno, era un espectáculo hermoso, tan colmado de interesados en conocer las ideas expresadas por el humanismo, que tuvimos que sentarnos en unas escalinatas, porque los asientos estaban todos ocupados, muchos se encontraban de pie y las luces no alcanzaban a iluminar a todos para tener una visión amplia.
Luego de una alegre y corta presentación de José Féres, quien nombró a todos los participantes de la mesa y agradeció a todos los presentes por asistir, comenzaron tomando la palabra los representantes de las editoriales. Mauricio Vlastelica, representante de Urano ediciones, fue conciso, precisó la internacionalización de este libro a diversos países, como España y toda Latinoamérica. Osman Vega, representante de Tabla Rasa, se centró más en el desafío que propone el autor y que ese desafío es totalmente realizable. Posteriormente Francisco Ruiz Tagle, director de la radio Bio-Bio, leyó las impresiones suyas sobre los planteamientos humanistas y utilizando su enorme experiencia periodística, mostrando datos importantes en su extensa exposición. Tomás Moschiati hizo gala de sus capacidades de oratoria y buen humor, ironizando con los políticos actuales.
Faride Zerán leyó su extensa intervención con algo de apuro, lo que no fue obstáculo para la claridad de sus ideas. Se notó la buena onda entre todos los participantes.
Finalmente fue el turno de Tomás Hirsch, quien agradeció especialmente la presencia de su madre y así dio paso a la explicación de como pudo llegar a sintetizar en un libro los conceptos de el Nuevo Humanismo y las luchas que se dan día tras día se deben dar para mejorar la vida del ser humano.
Entre las cosas que se me quedaron grabadas está el concepto destructivo de nuestra economía, que trata de lograr la eliminación de toda competencia, para "canalizar los recursos" dentro del sistema, cuando esto lo que hace es aumentar las brechas de la desigualdad social. El fin de la prehistoria trata de lo que podemos lograr si despertamos al mañana, con cambios de fondo en el sistema, extrayendo los avances y eliminando los lastres que frenan el desarrollo colectivo e individual.
Estamos frente a una gran oportunidad, podemos hacer cambios de verdad, y para ello necesitamos atrevernos a realizarlos. Otra de las ideas expresadas es que en estos momentos los avances tecnológicos y científicos avanzan de una manera más rápida que este sistema retrógrado, o sea que el sistema le quedó chico a los avances del mundo, para remediar esto hay que empezar a construir nuevas bases que sustenten nuestra vida. Así, Tomás Hirsch dijo bastantes verdades, cosas que los políticos tradicionales no se atreven a decir por conveniencia propia o de su partido, ideas plasmadas en su libro, el cual no solo señala con el dedo, sino que entrega soluciones a los problemas de fondo que posee nuestra sociedad.
Al finalizar, fue ovacionado por todo el público, quienes atentamente escuchamos a todos quienes intervinieron en este acto.
Al salir nos despedimos de Mónica y unos amigos que nos presentó, para mantenernos en contacto y avanzar en la difusión de las buenas iniciativas a través de medios como El Rancahuaso y los blogs.
Finalmente nos vinimos a Rancagua, no sin antes dar una vuelta a una exposición del arte brasileño en el acceso principal de la Estación Mapocho.
Para finalizar quedan algunas reflexiones:
¿Cuál es el objetivo de cobrar entrada a una exposición muy interesante como esta?
¿Porqué los políticos tradicionales parecen títeres de los poderes económicos?
Hay que ponerse las pilas y luchar por esos ideales.
El prólogo del libro hecho por Evo Morales, me pareció muy sincero y acertado, conciso, muestra de la calidad cultural del presidente de Bolivia.
Los insto a dejar los comentarios e impresiones de como les pareció este evento.
Las fotos que tomé las pueden ver en un flickr dispuesto para ello.
Hasta pronto.